Mente "medio-abierta"

Usualmente califico mi vida "normalita" como la de la Mala Rodríguez (chiste musical: Mala Suerte de Calle 13)... Salvo con algunas curvaturas que hacen que mis días y hasta años sean difíciles, pero mi positivismo (a veces siento que lo soy excesivamente) hacen que malas situaciones las tome para bien... Me ha pasado cada historia, por ser de "mente abierta"... Concepto que es muy mierda y que alguien me dijo que lo abierta es relacionado pero con las piernas. Genio recordame quién eras para darte los debidos méritos. En mi arcaico vocabulario tener la mente abierta (tomando la mente, como el pensamiento intáctil e invisible) es:

Ser capaz de criticar, analizar las opiniones, cuestionar dudas que nos invaden, no conformarse con lo que hay, tendencias y posiciones flexibles, abierto al diálogo, dispuesto a cambiar de opinión si alguno le vende una mejor postura. Definiendo vender como el acto de aceptar los argumentos del otro y sí lo que dice es válido y me convence, lo apoyo.

En sí, es un concepto que va más allá del sexo y la cama... Pero, en el trajín cotidiano es:

Estoy dispuesta a cualquier posición sexual, con cualquier persona, en cualquier momento, pruebo de todo, solo llámame que te cojo. En palabras sencillas: ¡METÉMELA YA!

Aunque he intentado decir que "No lo soy" porque esos términos no van de acuerdo a mi postura pero diferentes acciones hacen que en "la teoría" lo sea pero solo con no tener gusto por el sexo anal, no atraerme la porno y detestar los tríos (lo acepto "NO ME GUSTAN", soy la romántica suavecita que cree que es un acto de dos) me hacen ser una costumbrista cerrada (a mucha honra) y de mente cerrada.

Todos tenemos prejuicios, aunque no los aceptemos, aunque tratemos de ser abiertos a opiniones... Esa mente abierta también nos da la oportunidad de elegir si nos gusta o no. De probar o no. No se tiene que andar probando todo lo que se ofrece en el camino para tomar una posición, si hay 5 caminos para llegar por lo menos conocer 2 pero no los 5 (no creo que uno llegué a conocer el 100% de todo), podríamos probar una fruta que es venenosa solo por el placer de experimentar y no "cerrarnos" a las opciones.

Es claro que alguien que ha andado saboreando más tiene un mayor paladar gustativo, pero no les ha pasado que luego de probar mucho dulce, ya luego no se siente el sabor, aunque hayas probado diferentes helados, tu lengua no saborea como lo hizo en la primera lamida y es claro que todos los sabores de helados son diferentes, aunque en el fondo TODOS sean helado.

O con los perfumes, llega un punto en que la nariz ya no huele más debido al exceso que se hizo para que percibiera distintas fragancias. Lo mismo pasa con las experiencias en la vida, si se prueba mucho, llega un punto en que no tienes tan fresco el sabor del helado de caramelo, pues ya has probado 20 sabores más y no sabes si te gusta más el de caramelo, el de chicle o el de ron con pasas porque los probaste en distintos momentos y situaciones. Peor si te gustan los tres por diferentes razones, ya sean: buenos recuerdos, sabores o solo ese sabor haz probado. Lo mismo pasa con probar en la vida y ser de "mente abierta"...

Hay situaciones que nos gustan y otras que no, por tanto no tenemos la obligación de comprar el paquete completo y usar el cualquier como regla general. Seamos de mente medio-abierta y aceptemos diferentes conceptos, diferentes propuestas no solo en el sexo, probando por gusto y no porque la mayoría lo disfruta. Seamos humanos, no robots. Si hay que cerrarla se hace de vez en cuando y saber escoger que es lo que realmente queremos... "El que agarra mucho, aprieta poco". Un anuncio para reflexionar: