Ménage à trois Parte I

Hubo un año en que sentí que no había hecho nada, así que con unos ahorros y las facilidades de mi universidad decidí viajar... Me emprendí como mochilera, lo único que tenía que hacer era voluntariado, así lograba el plan perfecto: viajar barato, andar por las playas y hacer bien social en este caso, me había metido para trabajar con las tortugas Baullas, no les tengo fotos porque no tenía cámara.

Era el "trabajo" perfecto para mi estilo de vida, dormía en la mañana, me levantaba al medio día, iba a la playa, las mejores olas que uno podría conocer: Playa Grande (claro después de Roca Bruja) y los más guapos turistas... Mmm allí nació mi amor por los brasileños y la cultura india. En la noche-madrugada hacíamos voluntariado...

Allí aprendí que el mar también tiene sus segundos de silencio, llamados sets (basta ponerle muchaaa muchaa atención al mar y por escasos 1 o 2 segundos se detienen las olas). Me cansaba de contar estrellas fugaces y fueron mis segundas clases de astrología con un cielo plagado de estrellas. El grupo de trabajo era extraño, una mezcla rara, nuestros jefes eran solo hombres y los subordinados eramos SOLO mujeres, todas normales, excepto por Rebeca, ella era rubia natural, piel canela, ojos color miel, de las delgadas con cuerpo, de esas chicas que con cualquier ropa siempre se ven bien, que no necesitan maquillaje para verse linda, ella era una bomba, y lo sabía... Todas las demás la detestaban, claro, unas por envidia... otras por... Naaa, pura envidia.

Rebeca tenía un defecto (para mi era su "virtud"), un mal cáracter y una boca que nunca hacia silencio , hablaba tan duro con un acento rural, si algo le molestaba lo decía, esa fue la razón por la que nos llevabamos bien. Yo era la buena gente, ella era la sexy... Porqué claro, cuando uno es un 7,8 una 9,5 siempre colapsa, pero a mí no me importaba, era divertido como ella atraía a los chicos y yo... Yo hacía la plática amena...

Ahora que lo pienso, nunca me molesto. Todos los jefes intentaban seducirla... Siempre recurrían a mí... Y obviamente yo, yo le preguntaba a ella... Cristian era uno de los tantos jefes, las las chicas suspiraban por él -menos yo- era como Rebeca sabía que era sexy y tenía esa actitud de las personas que lo saben: era coqueto y trataba de prestarle atención a todas... Sonreía y se "sonrojaba" cuando le decían un piropo, hasta llegaba a hacerse el sordo para que se lo repitieran, cantaba; para las chicas tenía una voz preciosa, para mí sonaba como Los Galos, nunca supe su edad...

Pero como dice Chente Fernández: su pelo ya pintaba algunas canas, ese era su atractivo. Los otros hombres sabiendo como era Cristian hablaban mal a sus espaldas... Pura ENVIDIAA!!! Cristian y Rebeca nunca funcionarían juntos, eran gemelos en cuanto a personalidad, los dos tenían un ego, una autoestima tan alta y para que hablar del narcisismo, ninguno de los dos se pedirían algo, aunque ambos lo desearan... Pero eso solo yo lo sabía... Por maldad Rebeca se impulso un objetivo, conquistar a Cristian. Solamente me reí cuando me lo dijo... Ese plan no iba para ningún lado. Llegó un día en que les tocó a los dos solos trabajar en la madrugada, en la playa... Lejos de todos...

CONTINUARÁ (Post Muuuy muyyy largo).