And will you still love me when I’m no longer young and beautiful?
Will you still love me when I’ve got nothing but my aching soul?
Post dedicado a todas las que nos hemos sentido feas... Y para aquellas que se ven feas de por vida... Saben que: Son guapísimas, todo es cuestión de encontrar nuestro público meta y mucho amor propio.
Nunca he jugado de femme fatal, no me luce, no me va la actitud con lo que veo en el espejo. No soy una 90-60-90. Mi cintura mide 78 cm, tengo dos cicatrices en la cara, acné con el que lidio todos los días y un ojo más grande que el otro. Pero extrañamente lo que más me gusta son mis ojos... No por la forma, el color, sino por como hablan sin hablar...
Podría hablar de maquillaje y vestirse bien, pero toda esa máscara se cae, cuándo amaneces al lado de alguien... Un ex me dijo que la vez que más fea me vio fue al levantarme... ¡Vaya sorpresa! Porque claro, nunca tuve el glamour para levantarme primero y quedar "perfecta" para él.
Nunca me había preocupado por comer bien, por hacer ejercicio y aún así cuestionaba no tener un cuerpo perfecto. Claro, hay gente que se lo dieron, pero otras tenemos que hacerlo, siempre hay que echarse una manita en lo que se puede cambiar. ¿Si te ves al espejo y no te gustan esos brazos... Haz algo. Igualmente aceptar aquello que no se pueda cambiar, todos los días peleo con el espejo por la herencia familiar. O ahorrar para hacerse una cirugía, que igual no dará todas las respuestas si estás vacío. Hay gente hermosa exteriormente y se siente fea...
Pero sobre todo, y me lo dijo una señora... Hay que aprender a quererse, quererse mucho. Quererse requiere más que aceptar el cascarón, es valorar el interior. El interior, es el único que no se arruga con los años.
Al final, todos queremos ser queridos... Y para que nos quieran, debemos querernos primero.