Comeme, comeme todita...

El título es un sarcasmo a una noticia que salió ayer en el Diario la Extra, una muchacha muy "excitada y drograda" le arrancó de un mordizco un pedazo de miembro a su compañero, la policía siempre tan original, lo llamó penicidio --> Noticia Acá.

Ayer entre charlas, arrumacos y chineos nos reíamos de esta situación. Soy de las chicas que aman juegar, me gustan los besos, las caricias, los mordizqueos suavecitos, pero solo pensar que alguien lleve mis frases tan literales, me hicieron tener miedo de que un día me dejen sin un seno o sin el clítoris y que de esta última situación estuve muy cerca.

Porque claro, una vez un chico despiadado, pensaba que mi clítoris era un pedazo de carne, porque lo mordizqueo tanto que deje de sentirlo de lo adolorido que estaba, o el típico en que tratan de frotarme con la ropa puesta y la costura del jeans me quema.

Historias siempre sobran, de inexperiencias o falta de "comunicación". Mi profe sexual (sí, yo tuve un profe que me enseño a juegar, pero esa es otra historia) me contó que una vez una chica literalmente lo mamaba con los dientes... Él no le dijo nada, porque era la primera vez que se lo metía a la boca y él no quería que ella se inhibiera y se detuviera.

Yo en su situación, le hubiera pedido (no inmediatamente, pero si casi, despúes de secarme las lágrimas) que lo hiciera de otra manera, o tal vez con frases como: "Sabes como me excita que me lenguetees, o que me sobes con... "

Aunque claro, hay mordizcos que sacan las lágrimas antes de tener una reacción... Pero hablar... Todo es cuestión de hablar, de "pedir" de buena manera y siempre sexy para que no suene a exigencia.