llamarte,
o si quiera pensarte....
Te quiero en mi desayuno,
en mi almuerzo,
en mi cena...
Te quiero en mi mesa,
en mi cama,
en mi alfombra...
Te quiero en mí.
Sabemos que esto no es amor, es solo deseo carnal...
Mi boca intenta disimular,
mi piel no quiere erizarse,
y mi cuerpo no quiere temblar...
Mi boca intenta disimular,
mi piel no quiere erizarse,
y mi cuerpo no quiere temblar...
Estoy entumecida, y desaparezco... Me pierdo y vuelvo a intentar ser yo...
Entonces ven, cógeme, muerdeme, quiebrame, asústame y
di que amar tiene muy pocas letras para todo lo que sientes...
Que no me olvidas, que me quieres como tu musa,
dime que me quieres más que la vida misma,
Verborreame como sueles hacerlo...
Y luego sal corriendo, di que nos hacemos mal, que nada es para toda la vida, que tienes miedo, que yo tengo miedo, que soy inmadura, que soy muy simple y a vos te gusta lo complicado...
Y volvamos a repetir la misma escena el próximo fin de semana.
O mejor adelantemos todo...porque yo, yo
¡Quiero tenerte YA!
jummmm... eso me recuerda a quien me gustaría tener para el desayuno, media mañana, almuerzo, café de la tarde, cena y a la medianoche... en fin, esos deseos carnales que solo con un encuentro piel a piel se quita!
ResponderBorrar;) saludos dear, pasaba a saludar jeje
es conocido tu apetito inconmensurable, sin embargo creo (y me alegro) que se están enamorando y se hacen los duros... ¡ja! amor carnal ¿y lo quieres siempre contigo? ¡ja!
ResponderBorrarun saludo de lo mas atarbán
Pues a saborearlo, que la vida se sabe que es demasiado corta para esperar..
ResponderBorrarDirecto, honesto y dulce a la vez. Muy bueno. Gracias.
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