Donde pongo el ojo... pongo el...

♫♫ He didn't even say goodbye
He didn't take the time to lie

Bang Bang
He shot me down

Estábamos en un bar de putas… Lo llevé allí porque amo la comida y no sabía que era un bar de putas, siempre había ido a almorzar, no a cenar….

Pero me subió el autoestima sentir las miradas de odio de esas putas al ver que mi “supuesta comida” estaba más joven y guapa que sus remedos cincuenteros llenos de viagra. Él se sentía incómodo, pero lo disimuló viendo el futbol. Su mirada se concentraba en la comida, mi cara y el televisor…

Yo me perdía entre piernas rasuradas, olor a plancha con tanto pelo lacio, minifaldas que llegaban al ombligos, body-splash olor fresa y maquillaje que disimulaba ciertas imperfecciones.

Yo hablaba con él de la guapa, la fea, la colombiana, la dominicana, la nicaragüense y por supuesto, la tica… Estábamos en un bar de putas interracial e internacional...

Una de ellas se levantó para ir al baño… Llegó otra y empezó a coquetearle a su “carne”… Cinco minutos después estaban discutiendo… A esa puta se le había olvidado “mear” su territorio… Pero sabía mordisquear bien, porque de un pronto a otro vimos como la invasora huía con la cola entre las patas y cojeando de una pierna…

Entre risas le dije:

-Voy a ir al baño y voy a durar mucho, para que veas que en este bar si eres exquisito.

Di dos vueltas por todo el bar, oriné, canté, bailé, peiné mi pelo con el agua, me rasqué la nalga derecha, me acomodé el calzón de ositos… Duré unos ¿20 minutos? Estaba lista.

Llegué a la mesa, y él no paraba de carcajearse… Estaba rojo de la risa y de la vergüenza. Pele los ojos y pregunté:

-¿Qué pasó? ¿Nadie te volvió a ver? 

-¡Measte bien tu territorio! 

-¿Mi territorio? ¿Cómo lo mie? 

-Sí, vinieron varias a sentarse y dónde veían tu bolso no tuve que decirles nada más…