11 may 2020

Yo albañil, carpintera y orgullosamente MUJER.

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Me gusta la albañilería, la carpintería, todo lo que tenga que ver con uno como creador, con sus manos. 

Soy mujer y en ese oficio, existe bastante machismo y a pesar de que no tengo años de experiencia en el sector, existe la lógica además de vídeos de Youtube y pues me ha tocado resolver todo tipo de problemas en casa porque soy LA MUJER DE LA CASA. 

Mi mayor hazaña, fue quebrar los tubos a las 3 AM por creerme Spiderman y querer entrar a la casa por la parte de abajo.

Para que se hagan la idea, de lo traviesa que era (¿soy?)... Mi casa es de dos pisos (con entradas separadas, porque antes eran dos casas) Ahora vivimos en el piso de arriba, porque el de abajo, es como un sótano. No me di cuenta que no traje las llaves de arriba, cuando estaba abajo buscando tiliches... Al darme cuenta, intenté escalar por el cielo raso, para subirme por el patio de la casa de arriba. Mientras subía, me paré en los tubos de agua. Y bammmm, Spiderman bañado a las 3AM. 

Por supuesto, nadie estaba en casa, tuve que llamar a papi, romper un par de cañerías y arreglar la tubería con las instrucciones gritadas por papi, porque era la única que cabía (además de las ratas y cucarachas).  Esa historia es de hace más de 10 años... Parece que un gato, rompió la tubería que es la salida del agua de la lavadora hace una semana... Así que esa misión vuelve... Aunque con mayores retos, incluidos los 10 kilos de más. 


Necesitaba unos bombillos especiales, para una lámpara que tiene una rosca extraña, así que llevé los bombillos.

-Me puede dar estos bombillos.
El chico me los da, los veo y se parecen, pero no me convence, es como ponerla a un gato orejas largas y pensar que es un conejo.
Sigo cuestionando, el chico molesto me tuerce los ojos y me dice que si son esos, que solo tienen de esos... Otras opciones no hay.

Sigo de necia, en que no se parecen, si por favor puede buscar... Busca de mala gana, al final los llevo por precio y como él "sabe más que yo"... Pues sí solo esos hay.

Llego a la casa a ponerlo... No cabe. Resulta que me vendió el modelo E14 y yo ocupaba el E12.

Eso pasa porque uno no confía en sus gónadas. Y sí una gónada dice no, es no. Aunque el vendedor sea un colombiano guapo que te diga que te hace descuento. 

Me llama mi vecina, para que la acompañe a cortar un vidrio... Saca pedazos de vidrio, para una ventana. Mido la ventana, apunto en un papel, hago un dibujo, le doy sugerencias.  Su hermano se me queda viendo raro.

Vamos a cortar el vidrio, hay que montarlo.

Mi vecina con su hermano,  empiezan a colocarlos, me parece que no lo hacen muy bien.

-Creo que lo están haciendo mal. Mejor mida primero y marque con lapicero donde va a ponerlo, así no lo coloca mal y esa pieza está poniendo al revés. 
-¿Por qué no lo hace usted?
-Págueme, yo no trabajo de gratis. Además acá estoy de consultora experta. 

El hermano me vuelve a ver con cara de culo:
-¿Usted en qué trabaja?
-En finanzas
-¿Cuánto gana?

Le digo mi salario solo para que se calle por el montón de ceros... Traga grueso y empieza a seguir las instrucciones.  


Otra historia en la ferretería:

Después de esperar un rato para ser atendida, porque como no ando casco, ni tengo bigote o estoy empolvada... No me toman en serio, ya al rato me vuelven a ver.

Es que ando buscando una cosa, pero no sé como se llama (puramente esa foto):




Le explico lo que necesito, me tuerce los ojos y me dice: No, no tenemos.

Voy a otra ferretería, con un tipo más amable y le cuento toda la historia. (Acá se las resumí, pero fue un capítulo de 20 minutos).

-Se llama (olvidé el nombre) pero acá no tenemos, seguro que ellos si tienen. Hay gente que ni sabe ganarse el salario,yo soy el dueño de acá, si yo no vendo, no como... En esas ferreterías, aunque no vendan, igual les pagan.


Había una tapa, que tiene años haciéndose, pero nadie quiere hacerla. Pensé miles de formas de hacerla, me dieron opiniones, pero no, siempre hay una mejor manera.

Petruquio me había dicho que la midiera, que se la llevará a alguien que soldará y Voilá.  ¡Muy sencillo, muy caro! Ya me había cansado de insistirle que me ayudará con el proyecto, así que decidí hacerlo sola. 

Me puse manos a la obra, la hice con cemento, como 3 veces, porque primero le hacía falta agua, luego le eché mucha agua, luego le hacía falta piedras, luego le sobraban... Luego se movió el molde... Luego faltó cemento, luego siguió faltando... 

Papi (que no vive conmigo, pero es mi ángel de la guarda en cuánto a inventos y utilería MacGyver en casa) pasó por casa, vio la tapa... Y me dijo:

-Va bien, solo no olvide ponerle un alambre.
Le enseñé con una sonrisa el alambre y él se marchó.

Orgullosa le enseñé a Petruquio la foto, de la tapa, solo consideré que tenía un problema, la tapa era muy pesada:

-Le hubiera puesto una tabla en el fondo, para que no tuviera que rellenar tanto.
-Siempre todos saben como hacer las cosas, cuando ya alguien las hizo.
-No me pidió me opinión antes, sino si le hubiera dicho.

(Solo tuve esos flashbacks donde pregunté varias veces como podía resolverlo, pero era una discusión que no iba para ningún lado, la tapa estaba hecha). 

Aunque confieso, que la tabla, tampoco era (ni es) buena idea... 

Orgullosamente puedo decir: yo la hice (y no es por presumir, pero me quedó bien hecha). 


Tengo mil historias y podría seguir... 

Las mujeres podemos martillar, usar una caladora, un esmeril, un taladro y quizá no sepamos todos los nombres de las herramientas y si alguna vez pedimos ayuda con tonterías, no es porque no podamos hacerlo, es porque NO queremos hacerlo. 

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